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Toda la verdadCine clásico y actual
Pantalla de Sueños

Toda la verdad
Carl Franklin

Toda la verdad

Título original: High Crimes
País y año: Estados Unidos, 2002
Duración: 115 minutos
Estreno: 07.26.2002
Género: Thriller
Distribuidora: Hispano Fox Films
Director: Carl Franklin
Guón: Yuri Zeltser, Grace Cary Bickley
Producción: Jesse Beaton, Lisa Henson, Arnon Milchan, Janet Yang
Fotografía: Theo van de Sande
Música: Graeme Revell
Montaje: Carole Kravetz
Intérpretes: Ashley Judd, Morgan Freeman, Jim Caviezel, Adam Scott, Amanda Peet, Bruce Davison

He visto cientos de películas de juicios. Fiscales supermalos, abogados defensores que parecen detectives privados sacados de una novela de Agatha Cristie, y triquiñuelas legales y sórdidos secretos sobre los testigos. Por eso, Toda la verdad me ha sorprendido, porque sin ser una gran película, posee una historia que escapa a todos los tópicos y una trama que va ganando solidez y coherencia según avanza el metraje.

Toda la verdad

La trama parece de lo más simplona: Ashley Judd es una abogada excepcional, con un marido perfecto y una vida ideal, cuando de repente su marido es detenido por el gobierno. En ese punto es informada de que su marido es acusado de una masacre en un pequeño pueblo de Guatemala durante la intervención estadounidense en los 80. Sorpresa por parte de la protagonista que no sabía ni que su marido había estado en el ejército, ni mucho menos que hubiera desertado después de ser injustamente acusado. A partir de ahí la lucha por liberar a su marido, junto a las dudas que tiene, le harán ir descubriendo poco a poco toda la verdad sobre el hombre con el que está casada.

No es que sea la trama del siglo, la verdad.

Sin embargo, la película sorprende por su desarrollo. Lejos de convertirse en un melodrama, se nos presenta a una serie de personajes muy interesantes que van llenando la película: la hermana cabezaloca de la protagonista, el inexperto abogado militar que intentará ayudar en el caso, un Morgan Freeman alcoholizado. Y unos antagonistas de puro lujo, como el inflexible fiscal, el general que mandó la expedición a Guatemala, los ex-compañeros del acusado...

Toda la verdad

Toda la película tiene un aire a conspiración, a "malos en la sombra" que no podemos ver, muy en la tónica de la "teoría de la conspiración" que llevamos viendo desde que Expediente X avivó esa paranoia. Pero lejos de la explicación facilona, la película no nos muestra en ningún momento buenos ni malos, e incluso al final uno no termina de saber si hubo realmente un malo, ni qué personajes quedan absueltos ante nuestros ojos.

¿Cual es la verdad? Cada protagonista tiene su punto de vista, en absoluto objetivo, por lo que aunque acabemos sabiendo qué ocurrió, es muy difícil juzgar a los culpables, a los encubridores.

Como no he podido leer la novela en la que se ha basado, no podría asegurar si es una buena adaptación o no, pero como película cumple. Sin destacar la dirección, ni tener una interpretación magistral (los actores se pasan media película con el lagrimón/gotas de corilio en los ojos), la película cumple y sorprende, entretiene y te hace pensar un poco, y no creo que se le pueda pedir mucho más.

José Joaquín Rodríguez

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